La LGTBfobia llega a límites insospechados de surrealismo. Putin,en su fiebre discriminatoria, ha tachado de agente extranjero el colectivo “Coming Out” de San Petersburgo, una asociación LGTB que, de forma valiente, está luchando por los derechos del colectivo.
El ex miembro del KGB y, ahora, Presidente de Rusia,utiliza un lenguaje propio de la guerra fría o de películas de James Bond para seguir persiguiendo, discriminando y reprimiendo las personas LGTB. Su política claramente LGTBfoba tiene graves consecuencias físicas y psicológicas sobre las personas LGTB y promueve las agresiones de miembros de la extrema derecha rusa.
En los últimos meses, se han llevado a cabo ataques bestiales y persecuciones a miembros del colectivo, el Presidente Putin con su política discriminatoria y su fobia persecutoria favorece que las agresiones crezcan.
Se ataca, claramente, la libertad del colectivo y con el anuncio de que Coming Out «Será controlada de cerca para mantener el orden» también la libertad de expresión para reivindicar los derechos del colectivo y combatir las discriminaciones y los ataques.