Un reto de país
El pasado 2 de octubre se conmemoraron los dos años de la ley 11/2014 para garantizar los derechos de lesbianas, gais, bisexuales, transgéneros e intersexuales y para erradicar la homofobia, la bifobia y la transfobia. Dos años de una ley pionera en el reconocimiento de derechos pero también en la lucha contra las discriminaciones.
La ley recoge derechos básicos de las personas LGTBI, derechos que forman parte de los derechos humanos básicos para la vida digna, son derechos que deben ser para todos y todas y, por tanto, que todos y todas debemos defender. Para el Gobierno de la Generalitat uno de los objetivos de la ley es poner en la agenda política y el imaginario social el derecho a la diversidad sexual y hacer que los derechos de las personas LGBTI sean sencillamente derechos humanos defendidos por el conjunto de la ciudadanía y no sólo por los colectivos implicados.
A dos años de la ley aún tenemos mucho trabajo, muchos retos pendientes pero se han desarrollado, y se están desarrollando, las bases para que sea una ley efectiva. A estas alturas se está cerrando el decreto que dará paso a un nuevo reglamento del Consejo Nacional y se está trabajando con diferentes juristas sobre el modelo de intervención y sanción de actos LGTBIfobos, pero si bien estos temas son importantes y centrales , en los últimos dos años se han llevado a cabo acciones que ponen en marcha la ley de forma tangible.
Para asegurar el deber de intervención, que prevé la ley, en casos de discriminación LGTBIfoba hay sensibilización, información sobre la ley y formación a todas las trabajadoras y trabajadores de las administraciones públicas. Lo hemos hecho desde la Escuela Administración Pública de Catalunya y también dirigida a colectivos específicos (profesionales de la residencias de personas ancianas, para profesorado de los centros educativos de Catalunya, las oficinas de atención al público del Departamento de Trabajo, Asuntos Sociales y Familias, por poner algunos ejemplos) en todo el territorio de Catalunya, así como desde la Escuela de Policía de Catalunya para Policías Locales y Mossos e iniciamos una formación on line a las empresas para incluir la perspectiva LGBTI.
En el ejercicio efectivo de los derechos, estamos desplegando todas aquellas cuestiones que no por pequeñas dejan de ser importantes porque facilitan la vida cotidiana de las personas que por tener una orientación sexual o identidad de género diferente a la socialmente predominante o normativa encuentran muchos obstáculos. Algunos ejemplos serían: Protocolo con el Departamento de Salud para el cambio de Tarjetas Sanitarias con el nombre sentido; Adaptación de los centros sanitarios a la realidad de las personas Trans.; Protocolo con los Departamento de Cultura para el cambio de Carnés de Bibliotecas y otros carnés vinculados para el reconocimiento del nombre sentido; Despliegue del Servicio de Atención Integral al Territorio; protocolo específico para menores víctimas de bullying LGTBIfóbico; Protocolo para la reproducción asistida a mujeres lesbianas o sin pareja; Inclusión de la diversidad sexual dentro de los protocolos de prevención del acoso laboral … podríamos hacer un listado interminable y no haríamos visibles todas las acciones llevadas a cabo, pero hay que destacar, y reconocer, que aún nos queda mucho por hacer.
Lo que más preocupa, de forma urgente, a muchas entidades son las agresiones lgtbifóbicas. Se han hecho bastantes actuaciones en este sentido y hay que decir que no siempre es fácil adoptar medidas administrativas, aunque ya se ha hecho efectiva la primera sanción por insultos homófobos. Hay que seguir dotándonos de herramientas y metodología que permita mayor agilidad en la tramitación e instrucción de cada denuncia. Cabe decir, sin embargo, que es imprescindible que las denuncias lleguen. En este sentido, hemos iniciado una campaña informativa sobre la ley para que se conozca y se denuncie, que ninguna forma de agresión o comportamiento contra las personas pueda quedar impune o invisible.
Campañas como la del 012 en televisiones y radios: emisión del spot en horario punta, un programa específico en la red de televisiones locales o la misma publicación Ley 11/2014 en papel son medidas necesarias para la visibilidad, la aplicación y la efectividad de la ley. Una ley de defensa de los derechos del colectivo LGTBI pero una ley que debe ser de todos y todas. ¡Por muchos años!
Mireia Mata Solsona es Directora General de Igualtat de la Generalitat de Catalunya |