Visibilidad LGTB en la publicidad
La publicidad, un terreno en el que la afectividad LGTB era invisible hasta no hace mucho, está empezando a moverse. No sin problemas. La LGTBfobia aún existente intenta limitar los avances, pero se pueden constatar las señales de cambio. Recientemente en nuestro país el anuncio “Atrévete a cambiar”, que incluía una escena de afectividad homosexual, fue evaluado por la entidad Autocontrol para comprobar su idoneidad. La entidad autorreguladora de la publicidad ha avalado finalmente el anuncio, pero las entidades LGTB catalanas, muy acertadamente, valoraron que sólo el hecho que se tuviera que evaluar ya era LGTBfobia. En un país donde la libertad sexual fuera plena la queja de un usuario que no veía adecuado que dos hombres se diesen un beso en un anuncio no se habría ni admitido a trámite.
Aunque no estamos en el mejor de los países posibles, tampoco estamos en el peor. En un país con más historia democrática a sus espaldas, los Estados Unidos, la televisión Time Warner Cable ha retirado por quejas de espectadores un anuncio de ropa interior donde había muestras de afecto entre hombres. El argumento de la televisión ha sido que los contenidos del anuncio eran poco apropiados para la navidad. Hay que recordar que estamos en un contexto en el que la LGTBfobia genera mala imagen, quien la práctica, más si dependen mucho su imagen pública, dan otras motivaciones. Desde IDEMTV lamentamos y denunciamos esta censura y, añadimos, que la navidad no supone ninguna limitación legal, ni aquí ni en los Estados Unidos, para los anuncios. La visibilidad de la afectividad LGTB no tiene que tener límites, por lo menos más límites que el heterosexual.
Los anuncios que incluyen personas LGTB son cada vez más. Una de sus las limitaciones es que mayoritariamente suelen estar destinados a hombres gays. Hay, aún, carencias, problemas, dificultades y muchos obstáculos por superar. Será que estamos cerca del año nuevo, pero dejadnos ser positivos y que, pese a las carencias y las barreras, nos alegremos de que el mundo de la publicidad empiece a atreverse con la afectividad de las personas LGTB.